Si tu alma se enferma y olvida su razón de vida, y quieres saber qué le hace falta y qué tienes que procurarle, vuelca entonces tu corazón, retén hasta el máximo tu respirar, imagínate el centro de tu cabeza como un seno vacío, dirige tu mirada hacia él y concentrate para su contemplación. Entonces, de repente, ya no será un seno vacío y te mostrará lo que necesita tu alma para poder vivir.
-aforismo hindú